martes, 24 de marzo de 2020

CUANDO NECESITES AYUDA






Durante la Segunda Guerra Mundial, las islas británicas representaban la última línea de resistencia contra el avance de la opresión nazi en Europa. No obstante, bajo un incesante ataque y en peligro de caer, Gran Bretaña carecía de los recursos para triunfar en el conflicto. Por esa razón, el Primer Ministro británico Winston Churchill habló por la emisora de radio BBC y apeló al mundo, diciendo: “dennos las herramientas y concluiremos la tarea”. Sabía que, sin la ayuda del exterior, no podrían soportar el ataque que estaba enfrentando.

La vida es así. Con frecuencia, no estamos preparados para enfrentar las dificultades que la vida nos presenta y necesitamos una ayuda que está fuera de nosotros.

Hebreos 4:16
“Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro”

En el momento preciso, justo cuando lo necesitamos, cuando vienen las tentaciones, encontramos lo necesario en aquel que sabe bien cómo darlo. Recibiremos “misericordia”, el amor de Dios que observa y les ofrece ayuda a los creyentes abrumados por su debilidad. También estará allí “gracia”, el amo de Dios absolutamente inmerecido, que perdona al culpable. A ese trono de gracia venimos confiadamente confesando el pecado y recibiendo el perdón, llevando la aflicción y siendo consolados, entregando la debilidad y siendo fortalecidos, haciendo preguntas y recibiendo respuestas, pero sólo por causa del "gran sumo sacerdote” que ha hecho completa expiación de nuestros pecados.

En tales ocasiones, nuestro mayor recurso es la oración, porque nos coloca en la misma presencia del Señor. Allí, en su gracia y misericordia, encontraremos la ayuda necesaria.


RLM